Trucos y Consejos para preparar las Croquetas Perfectas

¿Sabías que las croquetas son la tercera tapa más popular en los bares? Este popular aperitivo, icono de nuestra gastronomía, es un delicioso bocado tan versátil como cremoso. Y, como son un plato que conquista todos los paladares, hoy vamos a contarte algunos trucos para que no se te resistan. Así que no te pierdas todos estos trucos y consejos para preparar las croquetas perfectas.

Trucos y Consejos para preparar las Croquetas Perfectas

Las croquetas son un aperitivo ideal. Crujientes y doradas por fuera, cremosas, jugosas y deliciosas por dentro. Morder una buena croqueta, jugosa y cremosa, es todo un festival para nuestro paladar. Casi nos da igual de qué estén hechas. Pues siempre son un acierto. Las elabores de lo que las elabores, sin duda, nunca sobrarán.

Pero para hacer unas croquetas que marquen la diferencia, hemos de tener en cuenta algunos trucos y consejos. Pues, ¿Cuántas veces no nos han quedado más secas de lo que quisiéramos? O las veces que se nos han roto al freírlas. Por ello, hoy queremos ayudaros a evitar estas desgracias en la cocina y que hacer croquetas sea siempre una alegría.

Trucos y Consejos para preparar unas croquetas perfectas

Bien es cierto que hacer unas buenas croquetas, como todo lo referente a la cocina, requiere práctica. Todos hemos dejado secas algunas croquetas, o se nos han abierto al freírlas quedando huecas y provocando un espectáculo pirotécnico en la cocina. Si estamos empezando, no desanimes. Recuerda que la práctica hace al maestro.

La Bechamel, la clave de las croquetas perfectas

Sin duda, lo que nos va a marcar la diferencia entre una buena croqueta y una normalita, es la bechamel. Morder ese rebozado crujiente y dorado y que la bechamel se derrame es toda una delicia. No queremos que esté igual (o más) dura que el rebozado, pues nadie querría repetir.

Aquí os contamos cómo hacer una buena bechamel, aunque bien es cierto que no es igual hacerla, por ejemplo, para una lasaña que para unas croquetas. Pero tampoco la prepararemos igual para todos los rellenos. Pues, por ejemplo, si utilizamos queso, éste nos ayudará a que la bechamel adquiera más consistencia cuando enfríe, sin necesidad de añadir harina de más.

La importancia de cocinar bien la harina, pero sin quemarla

Un punto clave para una buena bechamel es que no sepa a harina cruda. Es decir, podemos añadir harina si nos ha quedado demasiado caldosa. Pero es preferible que quede espesa e ir corrigiendo con leche.
Pues, al añadir la harina a la leche, no se tostará, con el riesgo de que dé mal sabor a nuestra masa de croquetas.

Combina la leche con caldo para hacer la bechamel

Otro truco para una masa de diez es utilizar y uno de los mejores consejos para conseguir las croquetas perfectas, además de leche, si es posible, caldo, dependiendo del relleno que vayamos a utilizar. Por ejemplo, en las croquetas de cocido, en casa añadimos la mitad de la leche y completamos con caldo de cocido. Esto potencia mucho más el sabor de la masa de nuestras croquetas.

Consejos para hacer croqueta: No olvides las especias

Dependiendo del relleno que utilicemos para nuestras croquetas, nos quedarán bien unas especias u otras. Sin embargo, hay dos que son imprescindibles para la bechamel: la nuez moscada y la pimienta molida. No olvides añadir una pizca de ambas a la masa de tus croquetas.

Pero recuerda que ambas especias aportan un potente sabor, por lo que, si no tienes mucha práctica con estos condimentos, es preferible ir añadiendo muy poquito y probando. Es mejor repetir y añadir una pizca más a pasarnos.

Potencia el sabor de la bechamel con un sofrito de cebolla

Aunque no es necesario prepararlo para todas las croquetas, a muchos rellenos le quedará genial preparar un sofrito de cebolla. Para ello, antes de hacer la bechamel, cocinaremos cebolla bien picada en la misma sartén, a fuego medio-bajo. Cuando la cebolla esté bien pochadita, sin necesidad de retirarla de la sartén, elaboraremos nuestra bechamel. Añadimos la harina, cocinamos e incorporamos la leche.
Si duda es un magnífico detalle para lograr unas croquetas perfectas.

Añade la leche caliente, así será más sencillo evitar que queden grumos

Puedes calentarla en el microondas o bien en una olla. Lo importante es que cuando incorpores la leche a la harina, ésta esté bien caliente. Y recuerda añadirla poco a poco sin dejar de mover con unas varillas.

Uno de los consejos más importantes para hacer croquetas, el reposo de la masa

Una vez que hemos preparado la masa de nuestras croquetas y hemos añadido a la bechamel los ingredientes seleccionados, hemos de dejar reposar la bechamel.
Hay quienes afirman que será suficiente con un reposo de 15 minutos. Sin embargo, lo ideal es que esté horas. Nosotros siempre hemos dejado la masa de un día para otro. De esta forma adquiere más consistencia, por lo que es más fácil darles forma a las croquetas; además, los sabores se integran mucho más.

Para dar forma a las croquetas

Masa de croquetas en plato

Ahora que hemos preparado una espectacular masa para conseguir las croquetas perfectas, vamos a ver algunos trucos y consejos para que darles forma sea una tarea sencilla.

Tenemos varias formas de hacerlo. La más tradicional es con dos cucharas. Esto es toda una técnica, y se necesita algo de práctica para coger la velocidad que tenían nuestras abuelas con las cucharas. Aun así, no desesperes, es una de las mejores formas de dar la forma característica de nuestras croquetas.

También podemos utilizar una manga pastelera con una boquilla ancha, o bien, elaborar nosotros mismos una manga pastelera con una bolsa plástica de alimentos. Cortamos una de las esquinas y empezamos a dar forma a nuestras croquetas de forma muy sencilla.

Si aun así, no te convencen ninguno de estos consejos, recuerda que ya podemos encontrar croquetas de todas las formas posibles, rectangulares, cuadradas, redondas… Por lo que no te preocupes mucho por esto y hazlas como más fácil te resulte. Total, en cuanto las frías no van a durar mucho en la mesa.

Consejos: El rebozado de las croquetas

Ahora que ya hemos hecho lo más difícil: la masa y darles forma a nuestras croquetas, ya nos queda menos para degustarlas. Vamos a continuar con otro de los consejos imprescindibles para nuestras croquetas: el rebozado. Ésta es la tarea más fácil de las croquetas (después de comerlas, claro). Simplemente vamos a bañarlas en huevo batido para, posteriormente, pasarlas por pan rallado.

Es muy importante que el huevo esté bien batido, de esta forma evitamos que queden grumitos de huevo que puedan adherirse a nuestras croquetas.

Puedes darles forma a la vez que las vas rebozando. Das forma a una croqueta, la pasas al huevo, escurres lo que sobre, y la pasas por el pan rallado. De esta forma te resultará más fácil, pues, si dejamos la croqueta ya con forma, pero sin rebozar, en un plato o una bandeja, corremos el riesgo de que se nos pegue, rompiéndose. Sin embargo, una vez la rebozamos en pan rallado, ya tenemos todo asegurado.  

Trucos y consejos para freír las croquetas perfectas

Antes de freír, vamos a dejar reposar las croquetas, otra vez, pero ahora con el rebozado. En esta ocasión bastará con unos minutos (una media hora aproximadamente). De esta forma el rebozado se asentará, quedará más pegado, y también secará ligeramente, por lo que estará más crujiente.

Cuando tengamos nuestras croquetas listas para freír, vamos a hacerlo en abundante aceite, para no tener que darles la vuelta. E iremos añadiendo pocas en cada tanda, para evitar que se peguen entre sí.

La temperatura del Aceite

Algo fundamental para que nuestras croquetas, además de quedar perfectas, no pierdan propiedades.

Lo ideal para el aceite es que esté entre 160 y 180ºC. Si está demasiado frío, cuando echemos las croquetas absorberán demasiado aceite, quedando muy grasientas y nada apetecibles. Si por el contrario, la temperatura es demasiado alta, nos repercutirá en el sabor.

Una vez fritas, resérvalas en un papel absorbente de cocina, para retirar el exceso de aceite.

Para un rebozado extra crujiente

Si te gustan las croquetas más crujientes aún, siempre puedes hacer un doble rebozado: pasa las croquetas por el pan rallado antes que el huevo.  Después, rebózalas en huevo y termina de nuevo con pan rallado.


Recuerda:

¿Qué cantidad de harina y leche hay que echar en las croquetas?

No existe una cifra exacta, pues, como ya comentamos, dependerá del relleno que escojamos, del manejo que tengamos con la bechamel o de la textura que prefiramos que tenga.
Aun así, aproximadamente, para unas croquetas se dice que son 50g. de mantequilla por 50 g. de harina y 400 ml. de leche. Sin embargo, insistimos que estas cantidades son orientativas. Pues también dependerá del tiempo que tengamos cociendo la masa, entre otros.

para comprobar que la masa está en su punto, bastará con fijarnos en que ésta se despega sin problema de los bordes de la cacerola o de la sartén cuando la movemos. Entonces, podemos retirar la bechamel del fuego.

¿Cómo evitar los grumos en la bechamel de las croquetas?

Si aun siguiendo todos los consejos para preparar las croquetas perfectas los grumos se nos resisten, siempre podemos triturar la bechamel antes de añadir el relleno de las croquetas.
Ésta es una buena y rápida forma de evitar los grumos. Y siempre es preferible a encontrarnos trocitos de harina sin disolver. Pues no será nada agradable.

¿Cómo evitar que las croquetas se deshagan o abran durante el rebozado?

Ahora que ya hemos visto todos los trucos y consejos para conseguir unas croquetas perfectas, vamos a resumir algunas de las cuestiones principales. Siguiendo todos los consejos, evitaremos fatídicos desenlaces como que, cuando ya estamos friendo las croquetas, a punto de degustarlas, se nos abran.

Esto se puede deber a la temperatura del aceite, a que no esté suficientemente caliente como debería.
También puede deberse al cambio de temperatura. Por ello, deja que las croquetas reposen antes de freírlas, pero a temperatura ambiente.

Pero, igual de importante es la temperatura del aceite como haber realizado un buen rebozado. Para ello, sigue los consejos que os dimos para el rebozado de las croquetas.

¿Cuánto tiempo debe reposar la masa de las croquetas?

Muchos afirman que con que repose un par de horas es más que suficiente. El reposado, además de servir para que la croqueta atempere, haciendo así que la bechamel coja consistencia y podamos dar forma a nuestras croquetas, sirve para que los sabores se integren.

Nosotros preferimos dejar las croquetas de un día para otro, siguiendo la tradición de las abuelas. Pues, en la cocina, no hemos de tener prisa. La paciencia es la clave de la croqueta perfecta, al igual que de muchas otras recetas.

¿Cómo freír las croquetas, congeladas o descongeladas?

Cuando haces croquetas, lo normal es preparar gran cantidad. Pues, ya que te pones, mejor que sobren. Por ello, es muy común tener que congelar parte de las croquetas. Para así tener siempre que queramos.

A la hora de freírlas, es independiente que estén congeladas o descongeladas. Pues puedes hacerlo de ambas formas.
En el caso de que estén congeladas, no es necesario si quiera que las descongeles. Pero, añádelas despacio, de poco en poco para no enfriar el aceite de golpe. E intenta que el aceite esté una temperatura algo más baja, entre 150º y 160ºC, para que se hagan bien por dentro.

¿Quieres poner en práctica todos estos trucos y consejos?

Pues no te pierdas esta espectacular selección con las mejores recetas de croquetas que tenemos en la web. ¿Con cuál te quedas?


Con esto terminamos todos nuestros trucos y consejos para conseguir las croquetas perfectas. Y vosotros, ¿Tenéis más trucos para conseguir unas croquetas de diez? ¿Conocíais estos consejos?  Si quieres compartir los tuyos con la comunidad TopGastronómico, recuerda dejarnos tus comentarios, consejos, opiniones… ¡Nos encanta leeros!
Y no olvidéis seguirnos en las redes sociales para estar al día de todas nuestras publicaciones. Nos podéis encontrar en Twitter, Facebook, Instagram y Pinterest.

¡Hasta la Próxima!

Publicaciones Similares

Suscribirse
Notificar vía
guest

0 Comentarios
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios