Si buscas un aperitivo rápido, lleno de sabor y con un toque mediterráneo, el surimi al ajillo es la receta que necesitas. Esta receta es una de esas maravillas culinarias que te sorprenden por su sencillez y su increíble resultado. En pocos minutos, con unos cuantos ingredientes básicos, puedes disfrutar de un plato que queda perfecto como entrante o incluso como acompañamiento en una cena ligera.
El surimi es un ingrediente versátil que muchas veces pasa desapercibido en la cocina, pero cuando se combina con ajo dorado y un toque de guindilla, se transforma en un bocado irresistible. Su textura suave y su ligero sabor a marisco hacen que combine a la perfección con este tipo de preparación, donde el ajo y el aceite de oliva juegan un papel protagonista.
Lo mejor de este plato es que puedes hacerlo en menos de 15 minutos y con ingredientes que probablemente ya tengas en casa. Además, si lo sirves con un poco de pan tostado, podrás aprovechar hasta la última gota del aceite infusionado con ajo, que es una auténtica delicia.
En esta receta te contaré paso a paso cómo preparar un surimi al ajillo perfecto, con ese equilibrio justo entre el sabor intenso del ajo y la suavidad del surimi. También te daré algunos trucos para que el plato quede aún más rico y puedas personalizarlo según tus gustos. ¿Listo para cocinar? ¡Vamos allá!
Receta de Surimi al Ajillo: Un Plato Rápido y Sabroso
Para empezar, corta el surimi en rodajas o tiras, según prefieras. A mí me gusta en rodajas gruesas, porque así absorbe mejor el aceite y los sabores del ajo. Luego, pica finamente unos dientes de ajo y, si te gusta el toque picante, añade una guindilla en rodajas. No te preocupes si no eres fan del picante, porque puedes omitirla o sustituirla por un poco de pimentón dulce para darle otro matiz.
En una sartén caliente, añade un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y sofríe el ajo junto con la guindilla. Aquí es donde empieza la magia: en pocos segundos, el aceite se impregnará del aroma del ajo, creando esa base de sabor irresistible. En cuanto el ajo empiece a dorarse (sin quemarse), incorpora el surimi y remueve bien para que se impregne del aceite. Déjalo cocinar un par de minutos a fuego medio, solo hasta que esté caliente y ligeramente dorado.
Para finalizar, añade una pizca de sal y, si quieres darle un toque fresco, espolvorea perejil picado justo antes de servir. Puedes acompañarlo con pan tostado para disfrutar del aceite con ajo o incluso usarlo como relleno para unas tostas. Es un plato tan versátil que puedes adaptarlo a cualquier ocasión. ¡Y lo mejor es que está listo en un abrir y cerrar de ojos!
Receta de Surimi al Ajillo
Equipamiento
- Sartén Para cocinar el surimi con el ajo.
- Cuchillo Para cortar el surimi y picar el ajo.
- Tabla de cortar Para cortar los ingredientes.
- Cuchara de madera Para remover durante la cocción.
Ingredientes
- 200 g Surimi Cortado en rodajas o tiras
- 3 dientes Ajo Picado finamente
- 2 cucharadas Aceite de oliva Preferiblemente virgen extra
- 1 unidad Guindilla Opcional, para un toque picante
- 1 pizca Sal Al gusto
- 1 pizca Perejil fresco Picado, para decorar
Elaboración paso a paso
- Corta el surimi en rodajas o tiras. Pica finamente los ajos y la guindilla si decides usarla.200 g Surimi, 3 dientes Ajo, 1 unidad Guindilla
- Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Añade los ajos picados y la guindilla, y sofríe durante 2 minutos hasta que el ajo esté dorado.3 dientes Ajo, 2 cucharadas Aceite de oliva, 1 unidad Guindilla
- Incorpora el surimi a la sartén y remueve bien para que se impregne del aceite y el ajo. Cocina durante 3-4 minutos a fuego medio hasta que el surimi esté caliente y ligeramente dorado.200 g Surimi
- Añade una pizca de sal y mezcla bien. Cocina un minuto más y retira del fuego.1 pizca Sal
- Sirve el surimi al ajillo caliente, espolvoreado con perejil fresco picado para darle un toque de color y frescura.1 pizca Perejil fresco
Notas
- Puedes añadir un chorrito de limón al final para darle un toque cítrico.
- Si prefieres un plato más ligero, puedes reducir la cantidad de aceite.
Información Nutricional
Productos Recomendados para un Surimi al Ajillo Perfecto
Salsera para acompañar con más sabor
El surimi al ajillo está delicioso tal cual, pero si te gusta mojar en salsas, tener una buena salsera es clave. Te recomiendo esta salsera de cerámica con tapa, ideal para servir salsas como alioli, mayonesa con un toque de limón o incluso una salsa de yogur.
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Platos elegantes para servir tu surimi al ajillo
Un buen emplatado hace que cualquier receta luzca aún más apetitosa. Si quieres presentar tu surimi de forma bonita y llamativa, estos platos de diseño son una excelente opción. Tienen un acabado moderno y sofisticado, perfecto para sorprender a tus invitados.
¿Cómo Hacer que el Surimi al Ajillo Quede Aún Más Rico?
Si quieres darle un toque diferente a esta receta, prueba a añadirle un chorrito de limón justo antes de servir. Esto potenciará los sabores y equilibrará la intensidad del ajo. También puedes incorporar un poco de pimentón dulce o ahumado al aceite para darle un matiz extra de sabor.
Otra opción interesante es añadir unas gambas a la sartén junto con el surimi, creando una versión más marinera de este plato. Quedan espectaculares y combinan a la perfección con el ajo y la guindilla.
¿Con Qué Acompañar el Surimi al Ajillo?
Este plato es muy versátil y puedes servirlo de varias formas. Si buscas algo sencillo, acompáñalo con pan tostado para mojar en el aceite. También puedes servirlo sobre una ensalada de hojas verdes, agregándole un toque fresco y ligero.
Si quieres hacer un plato más completo, acompáñalo con un poco de arroz blanco o una base de pasta, para que el ajo y el aceite impregnen cada bocado. ¡Las combinaciones son infinitas!
El surimi al ajillo es una de esas recetas que sorprende por su sencillez y su gran sabor. Con pocos ingredientes y en muy poco tiempo, puedes preparar un aperitivo o entrante delicioso, perfecto para cualquier ocasión. Si te ha gustado esta receta, te recomiendo que pruebes también otras ideas con ajo, como las colas de carabineros al ajillo, o las clásicas gulas al ajillo, un plato con el que siempre acertarás. ¡Seguro que te encantan!
