El manjar otoñal: Crema de rebozuelos con nata y tomillo

Cuando las hojas empiezan a caer y el aire se vuelve más fresco, hay un ingrediente que destaca en la cocina otoñal: las setas. Entre todas ellas, los rebozuelos son una auténtica joya gastronómica. Con su color dorado y su aroma ligeramente afrutado, estos hongos aportan un sabor inconfundible a cualquier plato, y hoy vamos a convertirlos en una crema suave, reconfortante y llena de matices.

El manjar otoñal: Crema de rebozuelos con nata y tomillo

Las cremas de setas siempre han sido un clásico en las mesas otoñales, pero esta receta tiene un toque especial: la combinación de los rebozuelos con nata y tomillo crea una textura sedosa y un aroma que invita a sumergirse en una experiencia de puro confort. Además, es una receta versátil, perfecta tanto como entrante para una comida especial como para una cena ligera en casa.

El secreto para lograr una crema espectacular está en la elección de ingredientes frescos y en una cocción pausada que permita que los sabores se concentren. Un buen caldo de verduras potenciará el gusto natural de los rebozuelos, mientras que la nata aportará esa untuosidad que hace que cada cucharada sea una delicia. Y, por supuesto, el tomillo fresco, que no solo perfuma la crema, sino que le da ese toque campestre y acogedor que recuerda a la cocina de siempre.

Si nunca has probado los rebozuelos en crema, esta receta te conquistará desde el primer bocado. Su equilibrio entre lo cremoso y lo aromático la convierte en un plato imprescindible cuando bajan las temperaturas. ¿Listo para descubrir cómo hacerla en casa?

Receta de Crema de Rebozuelos con Nata y Tomillo

El primer paso para preparar esta crema es limpiar bien los rebozuelos. A diferencia de otras setas, los rebozuelos suelen tener una textura más firme y menos porosa, lo que facilita su limpieza. Lo mejor es utilizar un paño húmedo o un pincel para eliminar la tierra sin mojarlos demasiado. Una vez limpios, se trocean y se saltean en una sartén con un poco de aceite de oliva. Este proceso no solo ayuda a reducir el agua que sueltan, sino que también potencia su sabor gracias a un ligero dorado.

Mientras los rebozuelos se saltean, se sofríe la cebolla junto con el ajo hasta que se vuelvan tiernos y dorados. Luego, se incorporan los rebozuelos ya dorados y se añade el caldo de verduras junto con el tomillo. Es importante dejar que la mezcla hierva a fuego lento durante unos minutos para que los sabores se fusionen.

Una vez que todo ha cocinado el tiempo suficiente, se agrega la nata para darle la textura cremosa y se deja cocinar unos minutos más. Después, llega el momento de triturar la mezcla hasta obtener una crema sedosa y homogénea. Para un acabado más refinado, se puede pasar la crema por un colador fino, aunque esto es opcional. Finalmente, se ajusta la sal y la pimienta y se sirve caliente, decorada con un poco de tomillo fresco y un chorrito de nata.

El manjar otoñal: Crema de rebozuelos con nata y tomillo

Crema de Rebozuelos con Nata y Tomillo

Esta crema de rebozuelos con nata y tomillo es una receta sofisticada y reconfortante. Perfecta para los días fríos, su textura cremosa y su aroma a tomillo la convierten en un plato exquisito para cualquier ocasión.
No ratings yet
Tiempo de preparación 10 minutos
Tiempo de cocción 25 minutos
Tiempo total 35 minutos
Plato Primer plato, Sopa
Cocina Española, Gastronomía otoñal
Raciones 4
Calorías 260 kcal

Equipamiento

  • Sartén Para saltear los rebozuelos.
  • Olla Para cocinar la crema.
  • Batidora Para triturar la crema hasta obtener una textura suave.
  • Cuchillo Para picar la cebolla y los rebozuelos.

Ingredientes
 

  • 300 g Rebozuelos Limpios y troceados
  • 1 unidad Cebolla Picada finamente
  • 2 dientes Ajo Picados finamente
  • 500 ml Caldo de verduras Preferiblemente casero
  • 200 ml Nata para cocinar También puedes usar leche evaporada para una versión más ligera
  • 2 cucharadas Aceite de oliva Virgen extra
  • 1 cucharadita Tomillo fresco Más un poco para decorar
  • 1 cucharadita Sal Ajustar al gusto
  • 1/2 cucharadita Pimienta negra Molida

Elaboración paso a paso
 

  • En una sartén grande, calienta una cucharada de aceite de oliva y añade los rebozuelos. Saltea a fuego medio-alto hasta que suelten su agua y se doren ligeramente. Retira y reserva.
    300 g Rebozuelos, 2 cucharadas Aceite de oliva
  • En la misma sartén, añade otra cucharada de aceite y sofríe la cebolla y el ajo a fuego medio hasta que estén tiernos y ligeramente dorados.
    1 unidad Cebolla, 2 dientes Ajo, 2 cucharadas Aceite de oliva
  • En una olla, combina los rebozuelos salteados, la cebolla y el ajo pochados. Añade el caldo de verduras y el tomillo, y deja cocinar a fuego lento durante 15 minutos.
    300 g Rebozuelos, 1 unidad Cebolla, 2 dientes Ajo, 500 ml Caldo de verduras, 1 cucharadita Tomillo fresco
  • Incorpora la nata a la olla, mezcla bien y cocina 5 minutos más a fuego bajo.
    200 ml Nata para cocinar
  • Retira del fuego y tritura con una batidora hasta obtener una textura suave y homogénea. Ajusta la sal y la pimienta al gusto.
    1 cucharadita Sal, 1/2 cucharadita Pimienta negra
  • Sirve caliente, decorando con un poco de tomillo fresco y un chorrito de nata si lo deseas.
    1 cucharadita Tomillo fresco, 200 ml Nata para cocinar
    El manjar otoñal: Crema de rebozuelos con nata y tomillo

Notas

  • Puedes sustituir la nata por leche de avena o almendra si prefieres una versión más ligera y sin lácteos.
  • Si quieres una textura más rústica, tritura solo la mitad de la crema y deja el resto con trocitos de setas.

Información Nutricional

Calorías: 260kcal (13%)Carbohidratos: 15g (5%)Proteina: 6g (12%)Grasa: 18g (28%)Grasa saturada: 8g (50%)Grasa polinsaturada: 2gGrasa monosaturada: 6gColesterol: 30mg (10%)Sodio: 400mg (17%)Potasio: 700mg (20%)Fibra: 3g (13%)Azúcar: 4g (4%)Vitamina A: 500IU (10%)Vitamina C: 20mg (24%)Calcio: 50mg (5%)Hierro: 2mg (11%)
Keyword Crema de rebozuelos, Recetas de otoño, Setas, Sopa cremosa
¿Has probado esta receta?Menciona @TopGastronomico o en el tag #TopGastronomico!
Compartir en Facebook Compartir en Twitter

Productos recomendados para una crema perfecta

Cazo de acero inoxidable: Cocinar la crema en un cazo de buen material evitará que se adhiera al fondo y garantizará una cocción uniforme. Además, te servirá para muchas otras recetas de sopas y salsas.

Batidora de mano de alta potencia: Para obtener una crema suave y sin grumos, es fundamental contar con una buena batidora. Un modelo potente facilitará el triturado y garantizará una textura sedosa. Además, si incluye varillas intercambiables, también te servirá para montar nata o preparar salsas.

Sartén antiadherente de calidad: Para saltear los rebozuelos sin que se peguen ni se cocinen de forma desigual, una sartén con un buen recubrimiento antiadherente es clave. Opta por una con fondo grueso para una distribución uniforme del calor.

El arte de limpiar y preparar los rebozuelos

Las setas silvestres requieren un poco más de atención a la hora de limpiarlas. Nunca se deben sumergir en agua, ya que absorben la humedad como una esponja y pierden parte de su sabor. En su lugar, lo ideal es utilizar un pincel o un paño húmedo para eliminar cualquier resto de tierra. Si los rebozuelos están muy sucios, puedes pasarlos brevemente por un colador y darles un enjuague rápido, pero asegúrate de secarlos bien antes de cocinarlos.

Otras variantes de esta receta

Si quieres darle un giro diferente a esta crema, puedes experimentar con algunos ingredientes extra. Un chorrito de vino blanco al sofrito de cebolla y ajo intensificará los sabores. También puedes añadir un puñado de avellanas tostadas antes de triturar la crema para conseguir un toque crujiente y un sabor más profundo.

Si prefieres una versión más ligera, sustituye la nata por leche evaporada o incluso por un poco más de caldo. Y para una presentación más gourmet, puedes coronar cada ración con unos rebozuelos enteros salteados y unas gotas de aceite de trufa.


Esta crema de rebozuelos con nata y tomillo es una receta sencilla pero llena de sabor, perfecta para disfrutar del otoño en cada cucharada. Su textura aterciopelada y su aroma a bosque la convierten en una opción elegante y reconfortante, ideal para sorprender a tus invitados o simplemente para darte un capricho en casa.

Si te ha gustado esta receta, prueba también otras opciones tan otoñales como las setas de cardo al ajillo, o los boletus edulis con jamón.

Publicaciones Similares

Suscribirse
Notificar vía
guest

0 Comentarios
Viejos
Nuevos Más votados
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios