Paseo por la Gastronomía española, conoce a fondo esta gastronomía tan apreciada

La gastronomía española es una de las cocinas más variadas y ricas del mundo. No hay más que ver que todo aquel que viene queda prendado de los platos más típicos de España. O que todo aquel que se marcha, añora nuestra alimentación. Además, en este mundo de prisas en el que cada vez es menos común cocinar; y optamos por comida rápida y platos precocinados, queremos hacer un paréntesis para conocer, con detenimiento, la gastronomía española. Sus platos más típicos y característicos, los ingredientes, costumbres, etc. Y apreciar un poco más una de las gastronomías icono de la popular Dieta Mediterránea. ¿Nos acompañas?

Queremos daros a conocer la gastronomía española de una forma diferente, dando un paseo gastronómico por esta tierra de contrastes, de sabores, de luz y color. Por ello, terminaremos de conocerla con un fantástico paseo gastronómico que te llevará a los mejores rincones de España; a la vez que te mostrará los platos más representativos de cada región. Pero antes, vamos a ver en qué consiste la gastronomía española:

Cuál es la gastronomía española

Y es que la gastronomía de un lugar no es únicamente sus platos más representativos. Pues engloba también sus costumbres, ingredientes, técnicas de cocción… En resumen, toda la tradición culinaria que, durante siglos, ha modelado esa gastronomía. Y, en España, contamos con una gran variedad de esta gastronomía. Ya que hay diferencia entre las ciudades y las zonas más rurales, entre interior y la costa, entre norte y sur… Por todo ello España cuenta con una gastronomía tan rica y apreciada. A la vez, que es un estandarte de la Dieta Mediterránea, una de las más saludables de todo el mundo.

La gastronomía española también destaca por su creatividad e innovación. Pues, son muchos los chefs españoles que han conseguido un importante renombre dentro del mundo de la cocina. Chefs mundialmente conocidos que han conseguido aunar modernidad con tradición en sus platos.

Todo esto hace que nuestra gastronomía sea una parte fundamental de nuestra identidad y cultura. algo de lo que estar orgullosos y a lo que hacer especial homenaje cada vez que nos metamos en la cocina a preparar cualquier cosa.

Platos típicos españoles que conquistan a cualquier turista

Además de nuestras playas, de nuestro sol y clima, y  por supuesto, de nuestras gentes, si hay un motivo que lleva a millones de personas a elegir España como destino de veraneo, ese es la comida. Pues muchos son los vienen por las playas y el clima, pero más aún son los que repiten destino por la gastronomía. Y algunos de los platos más apreciados por los turistas cuando llegan a España son los siguientes:

• El jamón. Sí, sin duda, el jamón, aunque no es un plato en sí, debe estar en el primer puesto. Ya que es un icono de nuestra gastronomía y algo que nadie que lo haya probado puede olvidar fácilmente.
  
• La Tortilla de Patatas. Otro clásico, además, muy humilde. Pues no es más que una elaboración a base de patatas y huevo, ideada con el fin de paliar el hambre. Pues esta sencilla elaboración ha conquistado hasta los paladares más exquisitos.

• La Paella, otro clásico de nuestra gastronomía. Un plato típico de Valencia pero conocido en todo el mundo.

• El Cocido también es otro de los grandes protagonistas en cuanto hablamos de gastronomía española. Un guiso de garbanzos contundente, del que encontramos innumerables versiones dependiendo de la zona.
  
• El Gazpacho: Para degustar el mejor de los gazpachos mejor nos vamos hacia el sur. Y es que, con el clima de allí, lo que más apetecen son los platos refrescantes, ligeros, y cargados de sabor. Y todo eso lo cumple a la perfección esta bebida elaborada únicamente con vegetales.

Pero estos son sólo algunos ejemplos más representativos y populares de la gastronomía española. Pero que no muestran ni una décima parte de la riqueza de nuestra cocina.

Entonces ¿Qué se come en España?

Aunque nuestra gastronomía es muy variada, y contamos con multitud de productos típicos, podemos generalizar con algunos alimentos. Pues, no hay que olvidar que la gastronomía española se basa en la Dieta Mediterránea, y, como tal, existen algunas características comunes.

• Sin duda, un estandarte de la gastronomía española es el aceite de oliva. Conocido como el oro líquido, es la grasa más utilizada en nuestra cocina. Lo cual hace que nuestros platos sean de lo más saludables y beneficiosos para nuestra salud. Ya que el aceite cuenta con innumerables propiedades para nuestro organismo. De hecho, pocos platos hay en nuestra dieta que no requieran de un mínimo de aceite para elaborarse o para servirlos. Pues también le damos mucho uso en crudo.
  
• Los cereales, como el pan. En España se come con pan. Da igual qué plato haya que el pan no puede faltar. Desde el desayuno a la cena es un imprescindible en prácticamente todas las casas.
  
• El jamón es un icono de la gastronomía de España. Todo aquel que lo prueba queda completamente prendado de este embutido del cerdo. En ningún lugar del mundo encontrarás jamón como el que tenemos en nuestras tierras, y es algo a lo que pocos pueden renunciar. Además, es un símbolo del aperitivo, siempre acompañado de una cerveza bien fría o una buena copa de vino.  Y es que el tapeo también es un gran icono de nuestra gastronomía.
  
• Verduras y Legumbres. También muy consumidas en nuestra dieta. Y es que si hay algo que caracteriza la cocina española son los guisos, los platos de cuchara. Cada región tiene su propio guiso de legumbres y verduras. Platos tradicionales, de origen humilde, pero muy contundentes, perfectos para recomponer el cuerpo tras duros días de trabajo en el campo. Y es que nuestra gastronomía está fundada en la cocina tradicional, humilde, de trabajadores.

Ingredientes típicos de la gastronomía española

Tras ver algunos platos de los más populares, y algunos productos que vuelven locos a los turistas, vamos ahora con los ingredientes más utilizados en nuestra gastronomía. Aunque, insistimos en que es ardua tarea al ser una tierra tan llena de contrastes.

• Verduras y Frutas. Como alimentación de la dieta mediterránea destacan también en España el consumo de verduras y frutas. Y es que nuestro país siempre se ha conocido por ser la huerta de Europa. Tanto el clima, la tierra, como las horas de sol, han propiciado aquí la agricultura. Es por ello por lo que contamos con tantísimos platos elaborados únicamente a base de vegetales, lo cual, convierte a la gastronomía española en una dieta muy saludable y beneficiosa para nuestro organismo.

• Pescados y Mariscos, dos fundamentales también de la Dieta Mediterránea, y, que no podían faltar en nuestra alimentación gracias a tantísimos kilómetros de costa con los que cuenta nuestra geografía, pero sin olvidar tampoco los pescados de agua dulce.

• Carnes, caza y embutidos, otro emblema de la gastronomía española. En esta categoría, si existe una carne en concreto que hemos de destacar, es el cerdo. Pues, aunque ya lo vimos en el apartado anterior, el jamón es un emblema de España. Un producto que incluso se ha intentado copiar fuera de nuestras fronteras sin ningún éxito. Porque, para obtener un buen jamón, es imprescindible la materia prima. Algo que da la tierra y el clima.
  
  Además del cerdo, en España es muy popular la carne de caza (país de agricultores y cazadores, dos pilares fundamentales de nuestra gastronomía); algo que queda demostrado en muchísimas de las recetas más tradicionales de nuestra tierra.

• Dulces y Postres. En esta categoría también contamos con una amplia variedad. Algo, sin duda, que debemos a los conventos, los responsables de la gran mayoría de dulces más tradicionales de nuestra tierra.

Como contamos con una gastronomía tan variada y rica, encontramos multitud de platos típicos y muchísimos ingredientes característicos de nuestra cultura gastronómica de lo más variopintos. Esto es debido a la cantidad de contrastes que se dan en nuestra geografía. Y es que poco o nada tienen que ver los platos más típicos de Andalucía si los comparamos con las recetas más tradicionales de Galicia. Es por ello por lo que contamos con una gastronomía tan variada y rica. Y, la mejor forma de verlo es dando un agradable paseo gastronómico a la vez que conocemos los lugares más bellos y los platos más característicos de cada región:

Paseo por la Gastronomía Española

Ahora que ya hemos visto algunos de los platos más representativos de la gastronomía española, y qué es lo que vuelve locos a los turistas que vienen por nuestra comida, vamos a comenzar este fantástico paseo gastronómico que os prometimos. Para, así, región a región, pueblo a pueblo y zona a zona, conocer los platos más representativos de cada lugar. Porque, si algo tenemos en España, es variedad y contrastes.

Galicia, tierra de Meigas y del buen comer

Si pensamos en Galicia se nos vienen a la mente sus playas de novela de fantasía, esos acantilados que desafían las leyes del mundo, el misticismo y la lluvia. Pero también se nos hace la boca agua al hablar de esta tierra. Aquí, no podemos dejar de probar el Pulpo a Feira, o pulpo a la Gallega, un emblema de la gastronomía gallega y también de la española. Y es que en Galicia puedes pescar los mejores ejemplares de pulpo, en concreto en la Isla de Ons. Un lugar paradisíaco que merece la pena visitar si te acercas por estas tierras.

Pero, además, son de visita obligada las Islas Cíes, un paraíso natural protegido que cuenta con playas vírgenes de arena blanca y aguas turquesas que nada tienen que envidiar al Caribe. También encontramos los acantilados más altos de Europa, en la Sierra de Capelada. Y el único río que desemboca al mar en cascada lo encontramos también en Galicia, el río Xallas; que se encuentra muy cerca de Finisterre, lugar que se creía el fin del mundo en la época romana.

Y, volviendo a la comida, además del pulpo a Feira no podemos olvidar el pote gallego, el cocido de la zona; así como las empanadas, tan características de Galicia; o el caldo Gallego.

Asturias, una tierra de contrastes

Tampoco podemos olvidarnos de los quesos asturianos. Y es que Asturias cuenta con cuatro quesos con Denominación de Origen: el queso Cabrales, el Gamonéu, el queso Casín y el Afuega’l Pitu.

Y, antes de irte de Asturias, recuerda probar el arroz con leche. Que, aunque es un plato típico de la gastronomía española, y se conoce en toda la península, el de Asturias es especial. Elaborado con la mejor leche de vaca que encontramos en el país, y su cocción lenta, hacen que sea el arroz con leche más cremoso y como más sabor de todos los que hayas probado.

Continuamos conociendo la gastronomía española por Cantabria

Dejamos atrás Asturias para avanzar hacia Cantabria. Con una gastronomía muy rica en cuanto a pescados y mariscos de sus costas, o la buena carne procedente de sus hermosos pastos. Allí podremos degustar un guiso espectacular, el Cocido Montañés, elaborado con judías en lugar de garbanzos, o las almejas a la marinera.

Respecto al paisaje, Cantabria ofrece playas paradisíacas, como las playas salvajes de Costa Quebrada, con más de 10 Km de costa. Si preferimos montaña, no podemos dejar de ver las increíbles vistas de los Picos de Europa que nos ofrece el teleférico de Fuente Dé. Este teleférico llega a una altura de 1.823 metros.

Y, antes de continuar nuestro paseo gastronómico nos detendremos en su capital, Santander, donde podremos comprar en cantidad de tiendas productos muy típicos de esta tierra. Seguro que conoces las Anchoas de Santoña, las más prestigiosas y con una enorme fama más allá de nuestras fronteras. O quesos con Denominación de Origen como el queso Picón Bejes-Tresviso, queso Nata de Cantabria o el quesico de Líebana.

En Cantabria encontramos también joyas prehistóricas como la famosa cueva de Altamira, en Santillana del Mar. Declaradas Patrimonio Mundial por la Unesco.

Continuamos nuestro recorrido, País Vasco

Esta tierra, con una cultura e identidad únicas, está llena de tradiciones, como sus danzas o los aizkolaris (competiciones de cortar troncos). En Bilbao encontramos el museo Guggenheim, uno de los más famosos del mundo. Inaugurado en 1.997, este museo de arte contemporáneo acoge a más de un millón de visitantes al año. Y después de verlo, como no comer unos pintxos, la esencia de su gastronomía.

El País Vasco cuenta con zonas que no te puedes perder, como el islote Gaztelugatxe, donde se rodaron algunas escenas de la serie Juego de Tronos. Además, aquí podrás encontrar también varios productos con Denominación de Origen, como el Txakolí, o el queso Idiazabal.

La Rioja, no sólo tierra de vinos

Continuamos este paseo por la gastronomía española bajando hasta la Rioja, a degustar sus típicas patatas a la riojana, por supuesto acompañándolas de un bien vino de la tierra, un Rioja, la Denominación de Origen más antigua de España, y también una de las más prestigiosas.

Esta comunidad cuenta con rincones muy especiales, como el Monasterio de Yuso, en San Millán de la Cogolla, mandado construir en 1.053. O joyas naturales como el Pico de Urbión, llenas de leyenda.

En Logroño, la capital, nos encontramos la calle del Laurel, famosa por ser un buen lugar de tapeo, dentro del casco antiguo. Y, continuando con su tradición culinaria encontramos otros platos típicos de la zona son las Pochas con codornices y las chuletas de cordero al sarmiento. Platos únicos de esta comunidad con mucho encanto.

Navarra, tierra de diversidad

Continuaremos el viaje hacia Navarra, con sus alcachofas con almejas, perfectas para coger fuerzas y pasear por sus calles empedradas del casco antiguo. O Casco Viejo, como lo llaman los pamploneses, el cual tiene hasta un día en su honor. En el día del Casco Viejo de Pamplona podrás disfrutar de comparsas gigantes y bailes regionales. No nos podemos ir del Casco Viejo sin probar en uno de sus bares los pimientos rellenos de bacalao o las pochas con chistorra.
Navarra cuenta con verdaderas joyas arquitectónicas, y es una comunidad con un gran peso histórico. Podrás empaparte de este arte, cultura e historia recorriendo la Ruta del Románico de Navarra.

Todo esto, por supuesto sin dejar de lado la naturaleza de este lugar, con lugares como la Selva de Irati, sin duda, uno de mis sitios preferidos. La Selva de Irati es el segundo hayedo-abetal más extenso de Europa, con 17.000 hectáreas prácticamente vírgenes. Un verdadero tesoro natural.

No nos iremos de Navarra sin antes ver sus productos con Denominación de Origen, como el Queso del Roncal, los espárragos de Navarra o el Pacharán de Navarra.

Paseo por la Gastronomía española, Aragón, Tierra de Contrastes

En Aragón es prácticamente obligatorio probar el Bacalao al Ajoarriero, una receta de las de toda la vida. Pues tiene su origen en los pastores que recorrían los Pirineos con su ganado, y cocinaban este plato con lo que tenían a mano. Es un plato muy sabroso y contundente, con una textura cremosa y un sabor intenso a ajo y pimiento

Continuaremos visitando la Muralla china de Finestres, en la provincia de Huesca, en el pueblo abandonado de Finestres. Se encuentra en la Sierra del Montsec, un espacio natural protegido del Prepirineo Central. Hace de frontera con nuestra siguiente parada en este viaje, Cataluña.

Después de esta caminata, qué mejor que recomponer el cuerpo con una buena paletilla asada, magras con tomate o Trucha Aragonesa, otros de los platos más típicos de la zona.

Tampoco podemos perdernos las Saladas de Sástago y Bujaraloz, uno de los cuatro humedales aragoneses incluido en la lista de la Convención Relativa a los Humedales de Importancia Internacional, especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas. Situadas en el área del desierto de los Monegros. Unas espectaculares salinas llenas de fauna y flora adaptada a estos suelos.

Y para finalizar nuestro viaje por estas bonitas tierras, nos despedimos de la zona visitando el Geoparque de Sobrarbe, donde podemos encontrar formaciones rocosas más antiguas con más de 500 millones de años. Incluido en el 2006 en la Red Europea de Geoparques, cuenta con unas rutas increíbles.

Cataluña, Tierra de Castillos

Salimos de Aragón para continuar nuestro viaje por Cataluña. Uno de los mayores destinos turísticos del mundo por su oferta turística, cultural, de ocio, y gastronómica, por la que estamos haciendo este fantástico viaje.

Y es que en Cataluña encuentras platos tan típicos como los Calçots, con la salsa romesco; la Esqueixada de bacallà, Fricandó…

Por supuesto, hablar de Cataluña es hablar de la Sagrada Familia, en Barcelona, la capital. Una basílica católica diseñada por Antonio Gaudí, iniciada en 1.882. En Cataluña también encontramos rincones tan únicos como los Jardines de Cap Roig, uno de los jardines botánicos más bonitos de Cataluña, con la Costa Brava de fondo. Cuentan con 17 hectáreas con más de mil especies botánicas. O como los pueblos del Pirineo Catalán, como Castellar de n’Hug, donde se encuentra el nacimiento del río Llobregat. En estos pueblos del Pirineo Catalán, uno de los platos más típicos es la Coca con Miel o la butifarra dulce con Manzana.

No podemos irnos sin ver el Castillo de Cardona, en Barcelona, el más importante de la zona.

Por supuesto en Cataluña también encontramos diversos productos con denominación de Origen, como el Queso del Alt Urgell y la Cerdanya, el Arroz del Delta del Ebre o la Pera de Lleida.

Valencia, tierra de las flores

Y como en este paseo por la gastronomía española no sólo se trata de comida, vamos a ir hacia la capital, donde nos encontramos con el Oceanogràfic, el mayor acuario de Europa, dentro del complejo arquitectónico vanguardista de la Ciutat de les Arts i les Ciènces.

Como no todo es comer, en Valencia tienes playas maravillosas, como la L’Arbre del Gos, para relajarte tranquilamente frente al mar y disfrutar de las vistas que nos ofrece. Si prefieres ciudad, puedes visitar la Catedral de Valencia, conocida popularmente como la Seu, en valenciano, construida en el año 1.262, un Bien de interés cultural. O el Mercado Central de Valencia, considerado como una de las obras maestras del modernismo valenciano.

Archipiélago Balear, mar y montaña

Continuamos nuestro viaje por la Gastronomía Española por Baleares, por donde comenzaremos por Mallorca. Aquí se encuentra uno de los pueblos más bonitos de la isla, Valldemossa. Además, es el pueblo más alto de Mallorca, escondido entre las montañas de la Serra de la Tramuntana. En esta isla podremos degustar la típica ensaimada mallorquina, para terminar con un paseo por la mítica Plaza Mayor.

En Menorca podrás perderte en sus calas vírgenes y desiertas, es la isla con más playas del archipiélago balear. En esta isla tienes que hacer una degustación de sus quesos, espectaculares. Sobre todo, el más famoso, el queso de Maó. Y como no probar la mítica Caldereta de langosta. En esta isla podrás olvidarte del mundo en playas tan paradisíacas como la Macarella y la Macarelleta.
No podemos irnos de estas islas sin probar la sobrasada, típica de las Baleares, o el Arroz brut, uno de los platos más representativos de este archipiélago.

Murcia, ciudad universitaria

Bañada por las aguas del Mar Menor y el Mediterráneo, en su ciudad puedes dar un romántico paseo por cualquiera de las dos calles más famosas e históricas de Murcia, la Trapería y Platería. Aquí podrás probar el zarangollo, un revuelto con huevo y productos de la huerta, que los bares suelen servir como aperitivo.

Podemos continuar nuestro viaje por la gastronomía española pasando por Calasparra, municipio murciano que le da nombre a su arroz con Denominación de Origen. A 350 metros sobre el nivel del mar, cuenta con un patrimonio cultural envidiable, como el Santuario de la Virgen de la Esperanza o la Torre del Reloj.

También puedes disfrutar en sus preciosas playas como Cala Cortina o Calblanque, integrada en el Espacio Natural Protegido del Parque de Calblanque. Después de pasar el día en una de estas espectaculares playas, no podemos irnos sin comer un buen Caldero del Mar Menor, o Caldero Murciano, un arroz caldoso imprescindible cuando viajas a esta región.

Otros platos típicos de esta tierra son el pastel de carne, el cual se remonta a la edad media; las marineras, una tapa muy conocida de ensaladilla rusa con una anchoa coronándola y la ensalada murciana, con tomate, aceitunas negras, cebolla, atún y huevo duro.

Y como no tomar de postre un rico paparajote, un curioso dulce murciano que se trata de una hoja de limonero rebozada en masa y frita. ¡Pero no te comas la hoja! Y aunque es difícil irse de cualquiera de sus islas, continuemos nuestro paseo volviendo a la península, destino Murcia.

Andalucía, cuna del arte

Andalucía suena a flamenco y sevillanas. Sin duda es una tierra llena de arte, con la gracia y simpatía que caracteriza a sus gentes, esta tierra ofrece multitud de rincones por descubrir. En este paseo por la gastronomía española vamos a ver sólo unos pocos, para no hacer eterno nuestro viaje. Y comenzaremos por el Parque Natural de Cabo de Gata, una de las franjas con mayor riqueza ecológica del mediterráneo.

Continuaremos por Granada y sus joyas arquitectónicas como la Alhambra o el Generalife, palacio del siglo XII con unos jardines espectaculares. Y aquí puedes descansar en cualquier terraza de bar y hartarte a tapas. Algo muy típico de esta zona.

Podemos terminar el viaje (pidiendo perdón a todas las localidades y pueblos que nos dejamos en el tintero) por Sevilla, paseando por el Real Alcázar, un emblemático palacio real de origen árabe. Pero tranquilo, que puedes refrescarte del sofocante calor con un frío y típico Gazpacho andaluz. Y es que, como dice la canción, tiene un color especial.

Extremadura, cuna de conquistadores

De esta magnífica tierra salieron personajes históricos tan importantes como Pizarro, Núñez de Balboa o Hernán Cortés, entre otros, que llevaron el carácter extremeño al otro lado del charco. En Extremadura encontramos joyas geográficas como el Parque Nacional de Monfragüe, entre Navalmoral de la Mota, Plasencia y Trujillo. Y después de una buena caminata por este precioso lugar, qué mejor que reponer fuerzas con cualquier plato de la gastronomía tradicional extremeña. Su gastronomía es fundamentalmente una cocina sencilla y rural, pero elaborada con materias primas de primera calidad. Como por ejemplo las sopas de ajo.

Tras la comida podemos seguir disfrutando de la naturaleza y visitar el Valle del Jerte, de donde salen las conocidísimas cerezas del Jerte, con Denominación de Origen. Para terminar nuestra visita podemos perdernos en pueblos tan mágicos como Guadalupe, Trujillo o Robledillo de Gata. Éste último declarado bien de Interés Cultural.

Otros platos muy típicos de la zona son la caldereta de cordero y el zorongollo. No podemos irnos sin probarlos.

Castilla y León, Historia y Cultura

En Castilla y León encontrarás todo lo que le puedes pedir a un buen destino vacacional. Monumentos históricos, yacimientos arqueológicos, naturaleza en estado puro, además de una gastronomía muy elaborada y con guisos muy peculiares y característicos de la zona. Un ejemplo de estos guisos son la sopa castellana y el cocido Maragato.

Con comarcas como Babia, en los Alpes leoneses, llena de tradiciones antiguas y grandes valores culturales. Aquí son muy famosos los embutidos y carnes, protagonistas de esta comarca ganadera. Pero también cuentan con dulces como la tarta babiana.

Tampoco podemos perdernos una de las ciudades más históricas de la región, Segovia, con un importante legado arquitectónico. Su icono es el acueducto de Segovia, un acueducto romano con más de 160 arcos. Una espectacular construcción datada en el siglo II d.C. Y en Segovia como no comer un rico cochinillo asado, su plato más típico.

Para terminar, iremos hasta Ávila, conocida por sus murallas medievales que se encuentran intactas, y por la noche, estas murallas iluminadas, nos ofrecen una imagen única de la ciudad. Y aquí, en Ávila, el plato que me gustaría destacar es sin duda las patatas revolconas, servidas con torreznos. Un plato muy contundente y rico.

Madrid, la capital

Nuestra capital cuenta con unas tradiciones culinarias provenientes de todas las zonas de alrededor, de cuando Felipe II creó la capital, que han sido adaptadas a las costumbres de esta zona. Lo más castizo de la capital son las rosquillas listas y las tontas, consumidas en las fiestas de San Isidro, patrón de Madrid. Otros platos muy típicos de Madrid son el cocido madrileño, los callos y los caracoles. También el potaje de garbanzos, muy común en Semana Santa.

Para descubrir la capital qué mejor que perderse por sus calles llenas de historia, como la Gran vía o visitar el Palacio Real. En Madrid puedes pasar días enteros visitando museos, como el Museo del Prado, el Reina Sofía o el Thyssen-Bornemisza. Y como irse de la capital sin comer un buen bocadillo de calamares o una tapa de tortilla de patatas, muy común en cualquier bar de la capital.

Pero Madrid no es sólo bullicio de la ciudad, también cuenta con rincones naturales mágicos, como los de la Sierra Norte de Madrid. Con pueblos como Puebla de la Sierra, la Hiruela o Patones de Arriba. En cualquiera de estos pueblos puedes degustar platos de caza caseros como el arroz con conejo.

Castilla la Mancha, tierra del Quijote

Castilla-La Mancha es una de las regiones más conocidas universalmente gracias al Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, quien recorrió esta región en sus aventuras, de la mano, o mejor dicho, de la pluma de Miguel de Cervantes. Tanto es así, que en esta región puedes hacer su misma ruta y toparte con los Molinos que atemorizaron al Quijote. ¡No son molinos, mi señor, son gigantes!

Y en esta tierra literaria puedes degustar las típicas Gachas, los Gazpachos manchegos, un guiso elaborado a parir de carne de caza desmenuzada cocinado con trozos de torta cenceña manchega, o el pisto manchego.

En Castilla-La Mancha encuentras maravillosos rincones como el pueblo de Sigüenza, que cuenta con la catedral de Santa María de Sigüenza y el castillo, convertido hoy en un parador turístico. Puedes perderte en cualquier ruta de las Hoces del río Cabriel o visitar el Parque Nacional de Cabañeros, de espectacular valor ecológico.

En Cuenca encuentras el nacimiento del río Cuervo, una espectacular ruta donde te rodearás de naturaleza en estado puro. Y como nombrar Cuenca sin ver sus famosas Casas Colgadas. Como después de todo esto seguro que estarás agotado, podemos terminar el viaje con, para mí, el mejor plato de la zona, las Migas manchegas, y de postre, unos miguelitos.

Islas Canarias, el paraíso en la Tierra

Vamos a terminar nuestro viaje por la gastronomía española poniendo un gran broche final, en las conocidas como Islas Afortunadas. Con clima subtropical y un gran prestigio internacional por sus bellos paisajes, estas islas también cuentan con una gastronomía propia de gran calidad, gracias a los productos que les ofrece el mar y a los cultivos de sus peculiares tierras.

Como ejemplo de cultivo propio, tenemos las curiosas plantaciones de vides que se realizan en Lanzarote, donde se cavan grandes hoyos en la tierra volcánica para acceder a la tierra vegetal. Esta forma de cultivo es única de esta tierra y nos da ese famoso vino, extraído del volcán, además de lo genuino de su cultivo, que hace incluso que este paisaje esté protegido por ley debido a su alto interés cultural y paisajístico. Pero ¿y con qué acompañamos este original vino? Pues en esta tierra, y como primer ejemplo de su cultura gastronómica, tenemos por obligación probar las papas arrugás con mojo. Probablemente la comida más emblemática de las Canarias.

Después de la comida, este archipiélago ofrece entretenimiento para todos los gustos. Si quieres relajarte y disfrutar de la vida contemplativa frente al mar, en las canarias encuentras playas de todos los colores, literalmente. ¿Te gustan las playas de arena blanca y fina? Puedes visitar la playa de Corralejo, en Fuerteventura. ¿Has estado alguna vez en una playa de arena negra? Acércate hasta Tenerife, a la playa Bollullo, cerca del Puerto de la Cruz. Si prefieres playas de arena dorada, en la Graciosa tienes la playa de Las Conchas.

Si por el contrario quieres perderte haciendo una ruta en paisajes que podrían perfectamente pertenecer a la luna, en este archipiélago tienes nada más y nada menos que siete volcanes. Uno de los más populares, el Teide, en Tenerife. Si prefieres pasear por pueblos, charlar con sus gentes y pasear por preciosas calles, puedes visitar pueblos como Tejeda, en Gran Canaria, o Teguise, en Lanzarote.

Y para volver con su gastronomía, es muy típico también de las canarias el Conejo en salmorejo, el escaldón de gofio o el queso asado con mojo.

Y, ahora que hemos terminado este precioso paseo por la gastronomía española y por, sólo algunos de sus lugares más turísticos o representativos de cada lugar, vamos a continuar conociendo la gastronomía española con otra costumbre muy típica de la zona: el Tapeo.

El Tapeo, una costumbre muy Española

Aunque en España contamos con productos y platos muy populares, si existe una costumbre que engancha a todo el que la prueba es el tapeo. Ir de tapeo o de tapas, no es más que salir a tomar algo, normalmente una cerveza, un vino, el vermut… de bar en bar probando las tapas, o pequeñas porciones de comida que sirven en cada bar o taberna para acompañar la bebida.

Las tapas o los pinchos, son pequeñas porciones de comida que sirven en los bares junto a la bebida. Algunas de las tapas más típicas son las patatas Bravas o alioli, las croquetas, los boquerones, aceitunas, jamón, etc.

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 Y con el tapeo, terminamos nuestro paseo por la gastronomía española. Con este pequeño viaje queríamos enseñaros la riqueza de nuestra tierra y de su gastronomía. Hacer que disfrutemos más de lo que tenemos muy cerquita de casa y conocer mejor nuestras costumbres y tradiciones.

Hemos pasado muy de puntillas por cada comunidad y por sus gastronomías, ya que no habría tiempo de describir cada lugar como se merece y mencionar cada una de sus maravillas, de sus pueblos y lugares, tradiciones y platos típicos.

Pero espero que haya cumplido su función, y aunque haya sido muy superficial seguro que todos hemos conocido algún rincón que no conocíamos o nos hemos apuntado ideas para próximos viajes.

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