Hoy os traemos un plato muy sencillo de preparar pero cargado de sabor. Se trata de un guiso muy sencillo elaborado con cordero, una carne muy saludable y de gran calidad. Nos referimos a la receta de caldereta de cordero, un plato muy típico de la gastronomía extremeña, pero que podemos encontrarlo por multitud de zonas de Castilla. Esta receta es perfecta sobre todo si tienes muchos invitados. Pues es muy sencilla de elaborar y verás que cunde de lo lindo. Acompáñanos a ver esta sencilla y riquísima receta.
Y es que en este tiempo no hay nada mejor como los guisos. Platos de cuchara, contundentes, bien calentitos, perfectos para entonar el cuerpo y hacernos entrar en calor. Además, si son como esta caldereta de cordero coma nos dará la energía suficiente para afrontar un duro día de invierno.
Pero, antes de ir con esta receta, no te pierdas esta otra de ternera estofada, otro estupendo guiso muy sencillo de elaborar. O, si quieres otra versión del plato, no te pierdas este estofado irlandés con cerveza Guinness.
Receta de Caldereta de Cordero
Para elaborar este plato no tenemos más que sellar la carne, elaborar un sencillo sofrito con las verduras que elijamos, y dejar cocer todos los ingredientes juntos.
Así de sencillo es de elaborar la caldereta de cordero. Pero, como todos los platos, podemos complicarlo todo lo que queramos. Es decir, modificar la receta a nuestro gusto para hacer multitud de versiones y variantes. Más adelante veremos algunas ideas.
Receta de Caldereta de Cordero, un guiso muy tradicional
Ingredientes
- 1 Kg Carne de Cordero (en trozos)
- 1 Cebolla
- 4 Dientes de Ajo
- 2 Tomates
- 1/2 Vasito Vino Blanco
- 1 Vaso Caldo de Carne
- Pimentón
- 1 Hoja de Laurel
- Tomillo
- Orégano
- Perejil
- Pimienta Molida
- Aceite de Oliva Virgen Extra
- Sal
Elaboración paso a paso
- Comenzamos nuestro guiso salpimentando la carne. En una olla amplia, ponemos un buen chorro de aceite, cuando esté caliente sellamos la carne hasta que quede bien dorada por todos lados. Reserva.
- En ese mismo aceite, vamos a elaborar el sofrito. Picamos muy bien la cebolla y rehogamos hasta que comience a transparentar, a fuego bajo. Incluimos los ajos enteros y lo cocinamos todo junto unos minutos.
- Añadimos la hoja de Laurel, previamente lavada, una pizca de tomillo, el orégano y el perejil, y movemos bien. Añade también el pimentón y, enseguida, los tomates rayados. Mezcla bien.
- Cocina unos minutos, hasta que el tomate reduzca. Añade entonces el vino y el cordero. Deja que se evapore el alcohol.
- Una vez el alcohol se haya evaporado, cubre el guiso con el caldo de carne y lleva a ebullición. Desde el momento en que comience a hervir, baja el fuego, y cocina entre 40 y 50 minutos a fuego bajo, hasta que la carne de cordero esté bien tierna.
- Pasado ese tiempo, comprueba que la carne está en su punto. Ya tienes lista una estupenda caldereta de cordero.
Información Nutricional
Otras ideas para tu guiso
Como dijimos anteriormente, este, al igual que todos los guisos, admite multitud de variantes. Por ejemplo, si queremos que nuestro guiso sea aún más económico, o queremos que nos cunda más, podemos añadir patatas.
Para ello, cuando quedan unos quince veinte minutos para que nuestro guiso termine, añadiremos las patatas chascadas. Es decir, no las cortaremos, sino que coma metiendo la punta del cuchillo, haremos palanca para arrancar trocitos de patata. De esta forma, soltarán todo el almidón en el guiso, haciendo que el caldo tenga aún más cuerpo.
También puedes incluir en el sofrito otras verduras como zanahoria o pimientos. O bien, añadir cualquier otra especia de tu gusto.
Completa tu menú de Caldereta de Cordero
Aunque por sí sola la caldereta de cordero es un plato muy completo, siempre podemos servirlo como un segundo plato si lo vamos a elaborar para más comensales. Por lo que si necesitas un acompañamiento, una guarnición, o servir un primer plato vamos a ver algunas ideas.
Como guarnición, las patatas siempre son un acierto. Acompaña la caldereta de cordero con unas patatas fritas, con unas patatas asadas, o bien con un puré de patatas.
Si prefieres hervir un primer plato, opta por platos sencillos, ligeros y refrescantes. Por ejemplo como una ensalada siempre será un acierto. Al ser un guiso contundente, y elaborado, acompáñalo con una ensalada sencilla y con pocos ingredientes. Por ejemplo, con una sencilla ensalada de tomate y ajo; o bien con una ensalada caprese.
Y, por supuesto, no olvides el pan. Pues te hará falta para mojar en la riquísima y estupenda salsa que queda de esta caldereta. Y, como ocurre con todo, mucho mejor si el pan es casero. Aquí os dejamos una estupenda y sencilla receta para que os animéis a elaborarlo vosotros mismos.
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